"La Luna" de Jaime Sabines
- "La luna se puede tomar a cucharadas
- o como una cápsula cada dos horas.
- Es buena como hipnótico y sedante
- y también alivia
- a los que se han intoxicado de filosofía.
- Un pedazo de luna en el bolsillo
- es mejor amuleto que la pata de conejo:
- sirve para encontrar a quien se ama,
- para ser rico sin que lo sepa nadie
- y para alejar a los médicos y las clínicas.
- Se puede dar de postre a los niños
- cuando no se han dormido,
- y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
- ayudan a bien morir.
- Pon una hoja tierna de la luna
- debajo de tu almohada
- y mirarás lo que quieras ver.
- Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
- para cuando te ahogues,
- y dale la llave de la luna
- a los presos y a los desencantados.
- Para los condenados a muerte
- y para los condenados a vida
- no hay mejor estimulante que la luna
- en dosis precisas y controladas"
La luna nos acompaña todo el año, unas veces nos enseña toda su cara y otras veces parece que se esconde detras de una puerta entreabierta para observarnos.
ResponderEliminarqué bellezón de foto y de poema. Hacía algún tiempo que no leía nadade Sabines, al que descubrir no hace tantos años... y qué genio era el tipo.
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